miércoles, 30 de abril de 2025

Mandriles y Gorilas.

 “Lo que hace el mono, hace la mona.” (Refrán)

La sabiduría popular pone en ridículo a quienes faltos de iniciativa imitan a otros. En el mundo animal hay ejemplares que se distinguen entre sí, a pesar de las aparentes similitudes y gestos. Los mandriles son monos corpulentos y coloridos, procedentes de las selvas tropicales de África. Hacen vida diurna y duermen en la copa de los árboles para eludir a los depredadores. Los gorilas son oriundos del trópico africano, se distinguen por su altura que suele ser de unos 180 centímetros y su masa corporal más o menos de unos 135 kilos. Por lo general caminan en cuatro patas, pero también lo hacen erguidos. 

El filósofo francés René Descartes (1596-1650) comenta: "Dicen que el mono es tan inteligente que no habla para que no lo hagan trabajar." ¿Será verdad? Entre sus tantas frases contundentes, el filósofo alemán Federico Nietzsche, (1844-1900) en oposición al evolucionismo, expresa: "Los monos son demasiado buenos para que el hombre pueda descender de ellos." 

En el lenguaje coloquial, gorila se le dice despectivamente a un bravucón violento. En la política argentina se menciona así a los catalogados como anti peronistas, opositores al régimen. Es decir, a las personas o a los sectores anti populares de sesgo dominante o anti obrera. Sea como sea, no dejan de llamar la atención los animales irracionales por sus características, entre ellos los mandriles y los gorilas 

lunes, 31 de marzo de 2025

Piojos.


 “Ojo al piojo” (Dicho popular) 

Es una advertencia que exige prestar atención a los dichos de alguien o a su presencia. A veces, situaciones inoportunas requieren prudencia. De igual modo, se pide sensatez si se trata de esos insectos pequeños que no vuelan: los piojos que invaden el cuero cabelludo. El contagio parasitario se da de persona a persona, por contacto directo. Esa infección se la conoce como pediculosis. Se alimentan de la sangre y se alojan en la parte posterior de la cabeza y detrás de las orejas. Las liendres son los huevos que anidan en el pelo. 

En 1988 se formó una recordada banda de rock argentina denominada “Los Piojos,” que se disolvió en el 2009. Se destacó por sus letras y melodías pegadizas. A sus integrantes se los asociaba con el número 87. En la quiniela argentina soñar con piojos se lo relaciona a ese número. 

Hay ocurrencias que apuntan a esos insectos sin alas. Como muestra valga el siguiente. ¿Qué le dijo un piojo a un calvo? No te agaches que me caigo. 

Es importante saber que tener esos bichos y sus liendres, no siempre es por falta de higiene, aunque no se descarta. Tampoco depende de lo mucho o poco que se lave el cabello. Pero, dice el refrán: “ En la cabeza del perezoso tiene su pasto el piojo.” Por eso es preferible no tenerlos. 

viernes, 28 de febrero de 2025

Teatro Colón.


 “El mundo es un gran teatro.” (Shakespeare)

Esa frase comprueba que en el devenir de la humanidad sus múltiples actores son sus habitantes. En la ciudad de Buenos Aires se encuentra el Teatro Colón, denominado en homenaje al descubridor de América. Es de renombre mundial por su acústica, arquitectura e historia. Su antiguo edificio se asentó al costado de la casa Rosada, donde al hoy está el Banco Nación, y funcionó desde 1857 hasta 1888. Su nuevo edificio fue inaugurado el 25 de mayo de 1908, habiéndose empleado en su construcción 20 años. Por su escenario pasaron recordados personajes que engrandecieron la cultura. En 1991 fue declarado Monumento Histórico Nacional. 

El dramaturgo estadounidense Arthur Miller (1915-2005) sentenció: “El teatro no puede desaparecer porque es el único arte donde la humanidad se enfrenta a sí misma.” La destreza escénica nació entre los siglos V y VI antes de Cristo en Atenas, Grecia. 

Al abrirse el telón de un escenario, sus actores trasmiten sentimientos, emociones y pasiones que hacen a la realidad humana. Sus mensajes y reflexiones explican lo complejo de la convivencia social. De ahí que es conveniente ir de tanto en tanto al teatro y mejor aún si es al del Colón.

viernes, 31 de enero de 2025

Cambalache.


 “Ni todo lo nuevo es bueno, ni todo lo viejo es malo.” (Dicho popular)

La novedad y la tradición, suelen traer aparejadas experiencias. El cambalache, según la Real Academia Española, alude a un cambio, a un canje, a una permuta de objetos distintos entre sí, de valor relativo. Hasta puede tener un significado peyorativo. Es una palabra derivada del latín que expresa el intercambio de una cosa por otra. 

El argentino, músico y compositor, Enrique Santos Discépolo (1901-1951) compuso en 1934 el conocido tango “Cambalache.” Su letra denuncia una versatilidad social con su problemática, aún vigente. Menciona personajes relevantes como Napoleón y San Martín, al sacerdote italiano Don Bosco y al famoso estafador ucraniano Stravisky. Además, no olvida al mafioso argentino don Cicho y al boxeador italiano Carnera. Tiene presente el válido argumento de la sabiduría popular: “Mezcladas andan las cosas: junto a las ortigas nacen las rosas.” 

La primera frase de ese tango es contundente: “Que el mundo fue y será una porquería, ya lo sé.” Inmortaliza que en todos los tiempos hubo y habrá desilusiones. Además, como parte del mensaje recuerda el refrán que dice: “Abre el ojo, y te ahorraras enojo.” Esa advertencia vale siempre en la vida y más aún frente a cualquier cambalache.