Hospital de Medina del Campo, en la provincia de Valladolid, España.
“En el hospital, cada cual llora su mal.” (Refrán)
Los romanos, allá por el siglo III antes de nuestra era, erigieron un templo a Esculapio el dios de la medicina. El emperador Claudio (10 a C-57 d C) en el primer año de su mandato, ordenó que en ese lugar se diera albergue y cuidado a los enfermos. Ese refugio de los dolientes fue uno de los inicios del hospital.
Recién en el siglo IV d C surge un sistema de beneficencia para la atención de los aquejados y necesitados, auspiciado por las iglesias cristianas de Oriente. Los Estados, con el correr del tiempo, se preocuparon por la salud de la población.
Bien decía el filósofo Platón (327-347 d C): “Donde quiera que se ama el arte de la medicina se ama también a la humanidad.” Testimonio que se da en el hospital.