domingo, 29 de junio de 2014

¡Gol!


La palabra gol es de origen inglés y significa lograr una meta u objetivo propuesto. Deportivamente alude a la obtención de un tanto a favor de uno de los adversarios. Es una exclamación que se grita con satisfacción o asombro, mezcla de encontrados sentimientos y emociones.

El 13 de julio de 1930 se jugó en Montevideo el Primer Campeonato Mundial de Fútbol. Ese día Lucien Laurent fue el primero en abrir el marcador a favor de Francia, su equipo que competía con México.

La Canción del Deporte, cuya música le pertenece al argentino Francisco Lomuto (1893-1959) y su la letra al brasileño Antonio Botta (1896-1969), dice en una de sus estrofas:

“Caballeros del juego hay que ser al campo a salir con fe y con valor adversarios que van a ofrecer en brega gentil ejemplo y vigor.”

Ideas que aluden a las actitudes que han de engalanar a todo deportista, aunque supere al contrincante y vocifere un gol. Cuando el esparcimiento llegó a su fin, la sabiduría popular condensa una reflexión en un proverbio italiano que dice: “Una vez terminado el juego el rey y el peón vuelven a la misma caja.”