jueves, 30 de enero de 2020

Boliche


“Manso como gato de boliche.” (Dicho popular)

Aún hoy, en algún comercio suele haber un gato sumiso como mascota, acostumbrado al ir y venir de la gente. En la región rioplatense, los boliches son negocios rurales, con despacho de comestibles y expendio de bebidas. En ellos, aún hoy se adueña del lugar algún felino. En estos sitios se dan encuentros sociales, animados por el juego como la taba, los naipes o las bochas.

En centros urbanos, así se denominan algunos locales bailables. En ellos se consume alcohol, al son de la música y al ritmo del baile para desterrar el retraimiento. El poeta español Gustavo Adolfo Bécquer (1836-1870) sostiene que: “La soledad es muy hermosa…cuando se tiene alguien a quien decírselo.”

Conocedores del tema, los orientales sentenciaban: “Sólo aquellos que van a fiestas regularmente, conocen la verdadera soledad.” Un proverbio chino nos recuerda que: “La fiesta no siempre es sinónimo de diversión.” En esos espacios, al encontrarse uno con otros, se motiva la comunicación, aunque no siempre se da.

La literatura y el periodismo dan cuenta de situaciones previstas o casuales que suceden, tanto en el campo como en la ciudad, dentro o fuera de un boliche.